Bomberos ¡Aquí, no se duerme!

Bomberos, ¡Aquí no se duerme! ¡

Para quien no lo sepa, el Consorcio de Bomberos de la provincia de Cádiz es el mejor de todas las Españas posibles, habidas y por haber. Claro, esto lo dicen sus eximios y preclaros jefes. Pero si escarbas o, simplemente, arañas un poco la piel de tal Consorcio, puedes encontrarte con alguna que otra  sorpresa… de esas que da la vida, como dice la canción.

Quiero comentar dos medidas que impusieron en los nuevos Parques con el objeto de modernizarlos. ¿Modernizarlos?.

Fueron  tomada por el Sr. Gerente, en pleno éxtasis creativo o, tal vez, autoritario. Se acabaron las camas que utilizaban los bomberos para
descansar cuando hacían guardia de noche.  ¿Era este mismo Gerente el que “anunció” que muchos bomberos eran una “lacra” (sic) y unos vagos redomados (¡¡Uffff!!).

Ahora, los bomberos tienen unos sofás de ínfima calidad que a las dos de la mañana se convierten en “catres cutres” para quienes quieran descansar. ¡Pobre espalda!. Todo lo contrario a la forma de actuar de los más prestigiosos Parques de Bomberos de España, que procuran que sus mujeres y hombres  estén lo más descansados posible para que rindan al máximo en caso de una emergencia.
Pero no contentos con esta revolucionaria medida, también  finiquitaron otra práctica habitual en muchas zonas de España: Que los bomberos cocinen y coman en camaradería en su centro de trabajo. ¡Fuera cocinas y utensillos! “eso en vuestras casas” les dijeron. De un plumazo borraron esta costumbre terapéutica que les ayudaban a compartir, conocerse, organizarse y relajarse. Son personas que necesitan tener la mente relajada y el cuerpo en forma, porque en ellos les va y nos va la vida. Pues ya sabéis: La comida en fiambrera y a calentarla en el microondas.
Ya escribiré de los sueldos de los jefes, de la jubilación multimillonaria que se prepararon, de los camiones que no cumplen los requisitos, de los cordajes caducados, de los arreglos chapuzas,  de los humos que se tragan, de la curiosa formación “on line! ”, de las sabrosas guardias “no” presenciales, de las increíbles oposiciones que han aprobado ¡solo!  los hijos y amigos de…, del convenio a 10 años auspiciado por CC.OO, de la carga de estrés provocada por el mal ambiente, de la división entre compañeros, de los expedientes abiertos… ¡Qué mareo! Se me había olvidado que estoy escribiendo sobre el mejor Consorcio de Bomberos de España.